Érase un perro que vivía en una casa tranquilamente. Un día un gato le molestó y el perro le persiguió. Corrió y corrió detrás de él. No se cansaban de correr, el uno detrás del otro. Pasado un rato, el gato resbaló y el perro le cogió. Comenzaron a pelear , el perro mordió al gato y éste arañó a su contrincante.
La dueña se enfadó mucho porque habían roto los jarrones de la casa y entonces castigó al perro, y el gato aprovechó para reirse de él.
Al día siguiente, el perro mordió al gato y fue tan grande la herida que tuvo que ir al hospital a curarse, entonces el perro se dió cuenta de lo mal que se había portado y fue a pedirle perdón.
En ese momento se hicieron amigos y desde entonces hacen todo juntos.
...Y colorín colorado este cuento se ha acabado.
Cuento realizado por Javier y Jorge
Muy bien el cuento chicos, a seguir echándole imaginación y a contar más historias.
ResponderEliminarUn beso y no olvidéis la lectura este verano.